Aquí no se promete nada-AQUÍ NO SE PROMETE NADA

lunes, 28 de enero de 2013

Acción 13/entrega 2


PIEDRA-LOMA-SILENCIO-LOMA-SILENCIO...PIEDRA!!-SILENCIO...







http://issuu.com/felixluna/docs/habitarlaloma?mode=window

domingo, 14 de octubre de 2012

Acción 13/entrega 1


PROYECTO TRASLADOS, FASE 3, ACCIÓN 13
BITÁCORA-LIBRETO DE ACCIÓN (Potencia y ocultamiento), en proceso.
ACCIONANTES:
Felix Luna
Milly Sánchez
Omar SM
IspectordeCerros(GM)



-PRIMER ACTO-
[...]



-SEGUNDO ACTO-
I.-


Caminamos la loma con el sentido de contemplar, de observar de tal manera que se estructurara sólidamente lo que iba surgiendo en el paisaje. En la casa azul de la loma, detrás hay una cocina de carbón, en ella, una mujer dibujada sobre la pared ahumada, de cuyos pechos brota leche que cae en ondas o más bien chorros crispados que se prologan a los costados y fuera de la mancha de humo. La mujer tiene una palabra atada al cuello "Silencio".



Salimos temprano para tomar la tenue luz diurna. En la cima de la loma "la coronita" un mogote con un mezquite y un nopal que es ya un árbol. Dos desgajamientos suceden, tal vez tres: Un personaje oculto tras la nopalera lanza piedras, más de diez en distintas direcciones. Otra figura grita ¡SILENCIO! El primero, deja las piedras y contesta ¡SILENCIO! Se muestra el sol.


La huella del cuerpo físico se hunde en la tierra húmeda por el sereno nocturno. La noche y la humedad dejan el campo fértil para hundir los zapatos, dejar un rastro. El cuerpo mental se desplaza rápidamente por la línea yacente que describen las lomas y cerros al rededor. Un sujeto lanza una piedra colina arriba, la levanta y vuelve a lanzarla, así tres, cuatro y cinco veces. El mismo sujeto arrastra una estela humana. Al lanzar la piedra proyecta una dirección, al caminar para asir de nuevo la piedra jala dicha estela. Hay una dirección centrípeta y una centrífuga. ¿hay algo fuera del dibujo?


Tres personas entran en un hoyo en la tierra, más bien tres hoyos; reconocen el perímetro cercano de la cavidad en la que se encuentran y como espasmos también miran la lejanía. Ciclos: La lluvia se remansa en balsas de agua sobre la loma esteparia, se filtra en el suelo y se evapora, tal vez crece alguna vegetación. Los tres sujetos entran a los hoyos (horadados por alguna máquina) salen sin más, se van.





Correr en círculos en una pendiente me imagino que es como dibujar con un espirógrafo en un papel que se desliza. Desaparecer u ocultarse tras la pendiente cuando se baja, reaparecer al subir. Dibujar un perímetro más o menos circular es construir un centro móvil. ¿Existe la "periferia"? Gritar ¡AQUÍ! es afirmar un sitio más que central, un sitio íntimo, el eco describe lo contiguo, desvanece la periferia. Así, exclamar ¡CIMA! coloca un estrado resonante bajo los pies de quien brama. Tal vez no existe la periferia.


Un personaje arroja una piedra hacia una duna de arena gris o morada, la piedra sube y resbala. Hay una herencia que como afrenta se carga: La razón forzada a comprender. Una larga columna de humo se desvanece al aire, sólo se ve ésta como testificación momentánea de algo ocurrido. Ese algo ya no está. La piedra resbala incesantemente.